Una banda queer amante del BDSM representará a Islandia en Eurovisión

El certamen podría tener su edición más diversa y polémica este 2019.

Eurovisión, el concurso de talento más famoso en Europa y Asia, se ha convertido en un escaparate para que artistas que de alguna otra forma no habrían despuntado, tengan un lugar en el firmamento, pero definitivamente lo que más nos gusta es que de unos años a la fecha, su espíritu de inclusión y diversidad se ha acentuado (al menos entre sus participantes). 

El ejemplo más claro y famoso es Conchita Wurst, el personaje femenino creado por Thomas Neuwirth que se convirtió en la ganadora absoluta en 2014 y causó polémica en todo el mundo por su imagen andrógina que incluye una tupida barba negra perfectamente bien arregladas. 

Por supuesto, la edición de este año no será la excepción. Ya te habíamos contado sobre Bilal Hassani, la joven estrella queer con ascendencia marroquí que representará a Francia en el concurso y que recibió un sinfín de muestras de odio tanto por su origen étnico como por su identidad sexual y su apariencia física. 

A la carrera de Eurovisión se ha apuntado la banda Hatari representando a Islandia, que desde 2014 no llega lograr a la codiciada final del concurso. 

Los integrantes de Hatari se definen a sí mismos como queer y muestran al mundo una imagen bastante disruptiva al usar una estética propia del BDSM. 

Su música ha sido clasificada como BDSM Industrial y es un constante canto contra el capitalismo.